Lamentablemente, la cultura contemporánea tiene una visión distorsionada de lo que significa predicar. En el mejor de los casos, ven al predicador como una reliquia del pasado, y en el peor, un arrogante que abusa de la autoridad religiosa. No hay lugar para Dios o para su verdad objetiva e inmutable en el pensamiento moderno. ¿Cómo pueden, pues, superar los pastores de la actualidad estas opiniones distorcionas posmodernas?

Predicando con Convicción, el autor usa de manera convincente la trama de una novela de misterio para hacerle frente a la idea contemporánea de que la verdad es relativa y ayudar a los pastores a descubrir formas nuevas de llevar a las personas a la verdad eterna de la Palabra de Dios.