Tiene usted en sus manos un ejemplar de un libro clásico de la fe cristiana. Aunque escrito muchos años atrás por uno de los predicadores mas destacados de Inglaterra, desde libro sigue llevando a sus lectores el mensaje inmutable y eterno: el hombre necesita la salvación y Dios es el único capaz de proveérsela.
El autor combina citas bíblicas, ilustraciones estimulantes y las dotes de su personalidad entusiasta para exponer claramente las dulces verdades de la gracia de Dios. El lector no puede menos que sentir la pasión de este ” príncipe de predicadores “, cuya motivación mayor en la vida fue la de guiar a otros al conocimiento del Señor Jesucristo.