A publicar libertad a los cautivos (espíritu, alma y cuerpo).
Y devolver la vista a los ciegos (cuerpo).
Conceder vestidura de alabanza en lugar de espíritu de quebrantado (esíritu).
Esto da lugar a las tres áreas de ministración que se abarcan en este libro:
- PECADOS
– Las áreas que podemos cambiar a través del aprendizaje y aplicación de las enseñanzas de Cristo.
- HERIDAS
– Daños hacia el alma o el cuerpo que requieren de la sanidad de Dios.
- DEMONIOS
– Seres espirituales que tratan de evitar que progresemos en las áreas ya mencionadas, los cuales deben ser expulsados.
Los Manuscritos del Mar Muerto
Homilética, de la Investigación al Pulpito
45 Años de Esperanza
Como quebrar el poder del mal 

