A publicar libertad a los cautivos (espíritu, alma y cuerpo).
Y devolver la vista a los ciegos (cuerpo).
Conceder vestidura de alabanza en lugar de espíritu de quebrantado (esíritu).
Esto da lugar a las tres áreas de ministración que se abarcan en este libro:
- PECADOS
– Las áreas que podemos cambiar a través del aprendizaje y aplicación de las enseñanzas de Cristo.
- HERIDAS
– Daños hacia el alma o el cuerpo que requieren de la sanidad de Dios.
- DEMONIOS
– Seres espirituales que tratan de evitar que progresemos en las áreas ya mencionadas, los cuales deben ser expulsados.