EL HOMBRE PERFECTO
Para ser enteramente honesto, no conozco nada que sea más aburrido el cristianismo sin Cristo. Incontables personas han dejado de asistir al lugar de adoración, simplemente porque se sienten enfermos de estar en medio de las actividades de una religión muerta.
Están cansados de tratar de arrancar un coche con un tanque vacío. ¡Qué lástima que ya no haya más gente alrededor para mostrarles que Jesucristo está vivo! No conozco nada que sea tan absolutamente emocionante como el hecho de ser cristiano, compartir la propia vida de Jesucristo en la Tierra aquí y ahora, ser atrapado con Él dentro de los propósitos determinados e invencibles del Dios todopoderoso y tener a nuestra disposición todos los ilimitados recursos de la Deidad para lograr dichos propósitos.
¿Puede imaginarse algo más emocionante que eso?