LA VIDA CRISTIANA APARENTEMENTE SE COMPONE DE DIVERSAS PRÁCTICAS EXTERNAS TALES COMO EL BAUTISMO, EL PARTIMIENTO DEL PAN, LA ADORACIÓN, LA ALABANZA. LA ORACIÓN, EL PERDONAR, SER HUMILDES Y AMARNOS MUTUAMENTE: Y COMO TAL ES MUY FÁCIL CENTRARSE EN ESTAS PRÁCTICAS Y DESCUIDAR LA REALIDAD ESPIRITUAL SUBYACENTE. ESTA REALIDAD ES EL ESPÍRITU SANTO. SIN EL ESPÍRITU SANTO, QUIEN ES EL ESPÍRITU DE REALIDAD, TODAS ESTAS PRÁCTICAS, NO IMPORTA CUÁN FIELMENTE LAS GUARDEMOS, SOLAMENTE FORMAN PARTE DE UNA CON- DUCTA EXTERIOR QUE CARECE DE VERDADERO CONTENIDO ESPIRITUAL
EN EL ESPÍRITU SANTO Y LA REALIDAD, WATCHMAN NEE HABLA DE LO NECESARIO QUE ES PARA EL CREYENTE AVAN- ZAR DE LAS PRÁCTICAS EXTERNAS A UN VIVIR ESPIRITUAL GENUINO QUE SE CENTRE EN CONOCER Y EXPERIMENTAR AL ESPÍRITU SANTO. LA OBRA DEL ESPÍRITU CONSISTE EN REVELARSE A NOSOTROS Y DISCIPLINARNOS. A FIN DE GULARNOS A TODA LA REALIDAD. AL REVELÁRSENOS, EL ESPIRITU SANTO NOS MUESTRA LA REALIDAD ESPIRITUAL Y AL DISCIPLINARNOS. EL NOS GUÍA, POR MEDIO DE NUES TRAS CIRCUNSTANCIAS, A EXPERIMENTAR DICHA REALIDAD. WATCHMAN NEE CONCLUYE CON UNA SOBRIA ADVERTEN- CIA EN CUANTO AL PELIGRO DE ENGAÑARNOS A NOSOTROS MISMOS CON RESPECTO A NUESTRA VERDADERA CONDI CION ANTE EL SEÑOR