Cuidados para ser un adulto en plenitud.
Algunos pensamientos de este libro:
“Tengamos presente que nuestra salud física y mental dependen también de nuestra salud espiritual. No descuidemos nuestros hábitos devocionales: la lectura de la Biblia, la oración y el testimonio, ya que constituyen vigor para nuestros huesos.”
“No está sano, aunque todos sus análisis y exámenes complementarios de salud scan normales, quien no encuentra la propia vocación y sentido de su propia vida, no tiene amistades o se siente disconforme consigo mismo.”
“No es la pretensión, ni remotamente, que estas páginas tomen el lugar de la consulta médica sino, por el contrario, el mensaje que deseamos enfatizar es el de la capital importancia que tiene la medicina preventiva. No dejemos que el problema nos sorprenda ¡Adelantémonos!”
“La plenitud de vida, la llenura del Espiritu Santo sólo es posible si estamos en contacto diario con la Palabra de Dios”
“Uno siempre tiene sueños que piensa nunca podrá concretar. Pero esta etapa de la vida es ideal para replantearnos esos sueños y ver si podemos llegar a cumplirlos.”
“A cristiano se realiza en plenitud cuando aprende que la vida es servicio, porque invoca el nombre de quien dijo que no vino para ser servido sino para servir y entregar su vida.”
“La plenitud de vida no tiene relación con la cantidad de cosas que poseemos, sino con la gratitud y el disfrute de lo que realmente tenemos.”