Es un libro sencillo y conciso, que aporta una gran ventaja ya que ha sido escrito originalmente en nuestra lengua.
Un libro sincero, claro y al alcance de las mentes sencillas para quienes suponemos fue escrito. No es este un libro definitivo de hermenéutica, pues esta no es estática ni mecánica ni matemática: es una ciencia del Espíritu; y el Espíritu que según él Apóstol Pablo, todo lo escudriña (1 Co. 2:10).