Puede cambiarlo a usted y al mundo que lo rodea para siempre.
¿Cuál aspecto de este mundo quebrantado no puede soportar cuando lo ve, lo toca, o se acerca a él? ¿Cuál realidad es tan preocupante como para impulsarlo a levantarse del sofá y tomar acción? Bill Hybels se refiere a esto como a una divina insatisfacción; como a una «tormenta de frustración» personal, que aunque provocada por algo que es totalmente incorrecto, puede ser el catalizador de una violenta determinación para ordenar las cosas. Es durante estos momentos de confrontación, cuando sucede que, como si se nos abrieran los ojos y el corazón escuchamos el susurro de Dios diciéndonos «yo me siento exactamente igual en esta situación. Ahora, ¡resolvamos esto juntos!»
Hybels lo invita a considerar el impacto dramático que su vida tendrá cuando voluntariamente convierta la frustración de su divina insatisfacción, en combustible para cambiar el mundo. Usando ejemplos de la Biblia, su propia vida, y las indispensables experiencias de otros, Hybels indica cómo usted puede:
- Encontrar y mejorar el área personal de su divina insatisfacción
- Luchar por ella cuando las cosas se ponen difíciles
- Continuar cuando las cosas toman el sentido contrario
Erradicando el sida. Combatiendo la extrema pobreza. Renovando matrimonios hambrientos de amor. Abrazando a personas marginadas. Expresándole ánimo a las personas más necesitadas. Aprendiendo a apoyarse en su divina insatisfacción solamente, esta generación podrá beneficiarse poderosamente de su audaz y brillante contribución.