No deje de luchar.
Usted debe tener la voluntad de ser algo en la vida, debe usar su determinación, su voluntad para enfrentar los contratiempos y vencerlos en el nombre de Jesús.
No se entregue.
No limite a Dios.
Al que cree todo es posible.
Es una gran promesa de Dios.
Pero muchas veces la gente se cierra en su molde premeditado de conclusiones y no ve a Dios actuar con milagros, a su favor.
No tema pedir.
¡Cuántas cosas nos faltan por que no sabemos pedir!.
Pedir es ser humilde, es doblegar el orgullo, es tocar el corazón del Señor con nuestra necesidad, pues sabemos que El tiene cuidado de nosotros.
Embárquese en un enorme desafio: descubra lo positivo de la negación.