Nuestra sociedad postmoderna, consumista y secularizada, rinde culto al conocimiento y eleva sus altares a todo aquello que entiende como «cultura». Y, sin embargo, ha extirpado de su concepto de «cultura» la idea de Dios y todo lo relacionado con la Biblia y la religión, lo cual ha desembocado en un delicado proceso que está transformando la ponderada educación laica en formación laicista.

¡Grave error! Nadie puede considerarse verdaderamente «culto» sin un cierto conocimiento de la Biblia, la cual ha producido, y aún produce, un profundo impacto en la forma de pensar de todo el mundo. Ningún otro libro ha sido publicado en más idiomas, leído por más personas e influenciado tanto el pensamiento y la conducta humana como la Biblia.

La doctrina laicista ha de ser contrarrestada con un esfuerzo y dedicación especial por parte de padres y educadores cristianos, que deben multiplicar sus esfuerzos para proporcionar a las nuevas generaciones el necesario conocimiento sobre la Biblia y su mensaje, educándolas en su lectura. Con todo, esta labor se hace cada vez más difícil, debido a que los jóvenes de hoy ignoran por completo el significado de muchas palabras y términos bíblicos que, aunque les resultan familiares, no les dicen nada.

El presente libro tiene, pues, el propósito de ayudar a paliar esta dificultad. A saber, estudia las principales palabras de contenido teológico utilizadas en la Biblia -como, por ejemplo, «santidad», «pecado», «justificación», «rescate», «arrepentimiento»- y analiza exhaustivamente su significado dentro del contexto de la sociedad actual.

Es, en definitiva, una herramienta útil y valiosa para educadores y padres cristianos, además de una obra formativa que todos los jóvenes cristianos deberían leer sin falta.